Esquirlas
La pregunta guía
la respuesta
las respuestas Hablar
en falso No preguntes
qué es eso Y la mirada
oblicua hay deseos de pensar
los polímatas las arenas
movedizas [Steiner hablaría de las diez (posibles) razones para la tristeza del pensamiento]
con la incertidumbre aún
mayor sobre la fragilidad
la ida hace que
apueste por
palabras para hacer visible
la pregunta
las preguntas
esquirlas
—-
Pensé en las esquirlas cuando, al bajar en Cuatro Caminos, para ir luego hacia Nentón, después de haber estado en Los Huista, le pregunté a quien me había llevado por esa región si podíamos ir hacia el oeste, en otro viaje. No, me respondió. Con los ojos hizo una seña: “Ahí están los halcones”.
—
Se desprende
pasa por acá
por estos lugares
ando
pensé
minucias
el tachilgüil en la casa donde estaba
alerta nada de “palabras
tóxicas y eunucas”
Extraer
lo residual habla
conduce
algo embrionario Luego
¿Quién habla? ¿Para quién habla?
Ojos
y las modalidades según
se habla
situarme
reconocerme frente a
la joven estudiante interesada
observa
practica
interroga
cursa
esta tesitura atrayente
fragmentos
Y la movilidad del
“insustituible oficio de pensar”
la libertad
maravilla
El anillo de Clarisse
no un solo sitio
todos los posibles
figuras las palabras
desparpajo la novedad
de la interrogante
la alumna por los trayectos
captura era
casi
la noche
—
Son mis días de descanso. Sí, mi familia está en Tuxtla. Yo trabajo en Chicomuselo, en la zona militar. Uno se compromete con lo que hace. Agarramos a uno de los buenos. Llamamos por teléfono para avisar. Y la orden fue que se soltara. Todos están metidos. Un día quisimos poner un retén por este lado. Acá, en esta parte. Vino el agente municipal a decirnos que nos fuéramos. Que no estuviéramos ahí. Si nos quedábamos, que nos atuviéramos a lo que pudiera pasar. Nos fuimos.
—
Alerta
oír
el horizonte
diciendo
“un lugar que no te obligue a matarte a ti mismo”
Estar
un sitio
ofrecer lo que se sabe
decir
la masa
el chicharrón
el frijol molido
Ella
quien los mezcla
mueve las manos
pide
utensilios
piensa
momento suyo
que le pertenece. Ese momento es suyo
Le pertenece
Su origen
en el presente importa
lo que hace
entregará
la alegría en sus ojos
su labor
Ella
la de la comida
en las tardes
costura
Hace años
la máquina de coser eléctrica con ella
su hija llegará
a visitarla En las paredes de la casa
las fotos de su hija
muerta hace cuatro años
Reza por ella
Reza por ella
Luego al dentista
cinco mil pesos
que sí tiene
por sus ahorros Luego
con su nieto hijo de su hija muerta
la angustia por él
por lo que será de él
Luego
La pregunta
Carlos Gutiérrez Alfonzo es poeta y ensayista. De su autoría son los siguientes volúmenes de poemas: Cirene (1994), Vitral el alba (2000), Mudanza de las sílabas (2012), Poniente (2012), Que se halla por ventura (2015) y Si quien leyera fuera otro (2018). Ha publicado los libros Ascenso y precisión. Tres poemas de autores chiapanecos (2016) y Minucias. Maneras de decir cómo se vive la frontera (2021). Se desempeña como Investigador del Centro de Investigaciones Multidisciplinarias sobre Chiapas y la Frontera Sur, de la Universidad Nacional Autónoma de México (CIMSUR-UNAM).
(http://alarmadascuerdasvocales.blogspot.mx/2013/09/carlos-gutierrez-alfonzo.html)