Juego desesperado
Frustración
Después de haber asesinado a veinte personas
Sin que nadie encuentre a las víctimas
Ni sospeche de mí…
Confieso
que ya me aburrí…
Yo, un día danés, gris, de otoño y demasiado largo.
JUEGOS TRISTES
SMS
Ayer mi teléfono se mojó con tu llanto
Y el tuyo se llenó de besos de un papá que te adora
Y que no quiere que sufras
Con mucho amor
Papá
Visita a Marta González, New York City Ballet.
Enferma de olvido
de la cosas
de quién es
de quienes fueron
su familia
sus amigos
dormita
en el salón del asilo
perdida en eso
de no saber qué recordar.
El muchacho que la visita
se acerca y le habla
a ese ser
que parece haber
también olvidado
para qué son
las palabras.
Ella escucha así
Como un mueble escucha
Cuando hablamos
Está sin estar
Está sin ser.
De pronto una idea
asalta al joven
que saca su teléfono
para despertar
con la música
su pasado.
Tchaikovsky
y su lago
se escucha
en el salón.
Y en la memoria
de su cuerpo.
Como un acto demiúrgico
La magia de la música
No logra levantarla
de su silla
de ruedas.
Sin embargo, sus manos
esas largas, finas manos
que hasta antes
de la música eran
alicaídas estructuras
óseas,
se despiertan
comienzan a bailar.
Su cuerpo entero
recupera
attitud.
Cada frase de ese lago
le adhiere una pluma más
a este cisne
que despierta
a ese cuerpo que recuerda
no sólo el vuelo
de sus alas
sino la mirada
que reconstruye
en el vacío
al temible
cazador
que es la muerte.
La música sigue
El cuerpo recuerda
un salto,
ahora,
imposible
y
el vuelo de sus manos
la attitud corporal
desmorona
a ese cisne
en la representación
de su muerte.
¡Sigue! Le dice el joven,
¡sigue!, es bello,
Nos tienes a todos
En lágrimas.
“Aquí entraba yo
En puntas”,
dice ella
(desde su silla
de ruedas)
y vuelve
al silencio semi dormido
De sus ojos
De su cuerpo.
Alguien aplaude.
Cuerpos y desiertos
Estará por allá
Estará por acá
El cuerpo diseminado
El cuerpo reventado
en el desierto de
Tarapacá
Para acá estará
Un poco más lejos
En un lugar que
ataca
Y
Ama.
Estará en el desierto
de Atacama.
Una mujer
morirá buscando
El cuerpo de su amado
Y quedará con el tiempo
como él
Diseminada y, con él,
Amándose
en Atacama.
(2018, después de haber vuelto a ver Nostalgia de la Luz de Patricio Guzmán)
Claudio Cifuentes-Aldunate es chileno de nacimiento y danés de adopción. Doctorado en literatura hispanoamericana por la Universidad de Friburgo, Suiza, con un doctorado sobre Mario Vargas Llosa publicado en Odense University Press i 1983, con el título Conversación en la Catedral, Poética de un Fracaso. Desde 1981 es profesor titular de Literaturas iberoamericanas en el Instituto de Ciencias de la Cultura de la Syddansk Universitet, Dinamarca.
En su vida académica ha tenido un interés central por la semiótica y el análisis literario y cinematográfico. Una parte de su investigación se centra en la escenificación de la verdad en la textualidad. Ha sido profesor invitado durante diez años en la Universidad de Aquisgrán, Alemania y ha sido miembro de LEIA (Laboratorio de estudios italiano-ibéricos e iberoamericanos) de la Universidad de Caen, Francia, donde se ha ocupado del micro-relato y de la literalización de la ciudad en poesía y prosa. Su último proyecto versa sobre el sentido del silencio en la cultura en general y en la literatura en particular. En el ámbito de la creación, ha incursionado anteriormente en el relato y la poesía en diversas revistas literarias como NOK (Noter og kommentarer) donde publicó Poesías junto a dos otros autores y en la revista Aurora Boreal donde ha contribuido con los relatos ‘Encuentro’, ‘De migraciones y exilios’,’ Quebrantos’ y el poema ‘La lista’.